13 julio 2009

LAS VUELTAS DE LA VIDA

El día de ayer domingo, después de haber pasado una noche genial de antro (que no incluyo ligue, ash¡¡) y haber llegado a mi casita a las 6 de la mañana dispuesto a dormir una gran cantidad de horas para recuperarme de las bebidas embriagantes que me eche, no imagine que una llamada telefónica me traería de vuelta solo dos horas después, a una cruda realidad.

El tono de Harry me despertó, no tenía ese número registrado, dije, ash, quien osa despertarme, la curiosidad triunfo, y conteste, era mi señora madre, muy alterada, pidiéndome que la acompañara a casa del novio de mi hermana a recogerla.

Sin razonar una sola de sus palabra dije que si, y me dijo que en 5 minutos pasaba por mi, tarde 4 de los 5que supuestamente tenia disponibles en tratar de despertar.

¿Qué había pasado?, revise mi celular, para ver la hora, casi las 9 de la mañana, y un mensaje de voz.

Nunca los reviso, pero por inercia, marque *86 y lo escuche. Eso era lo que necesitaba para despertar, se oía a mi madre discutiendo con alguien, bastante alterada cabe señalar, gritos, groserías, puertas azotadas, llanto, todo eso en menos de 10 segundos de audio.

Pensé en darme un regaderazo para despertar, pero sonó el celular, mi madre ya estaba afuera de mi domicilio, así que la idea se descarto y solo me vestí lo más rápido que pude.

No los quiero aburrir con la historia, además que no quiero ventilar asuntos que no son meramente míos, así que resumiré los puntos importantes, hubo una mega bronca, mi hermana y mi mama terminaron relaciones diplomáticas, y le estoy dando alojo desde ayer en mi pequeño domicilio.

Fue muy raro llegar a mi casa y verla ahí, la verdad no me causa ningún problema darle ayuda, y bien podría no hacerlo, porque cuando yo estuve en ese lugar, a mi nadie me ofreció una ayuda sólida, y se lo que es estar solo y sin rumbo, sin una mano amiga.

Pero no puedo hacer como que no es mi problema, que bien, no lo es, pero ella es mi hermana, y no puedo dejarla a su suerte, o que termine viéndose obligada a irse con su novio.

Mi madre por su parte, anda desaparecida, sabemos que se fue a Toluca, pero como toda una adolescente encaprichada, ni adiós dijo, tal vez esta bien, también ha pasado cosas fuertes, y no estoy en posición de criticar sus acciones, de por si ya sabemos que el instinto maternal estaba agotado cuando ella llego por su ración.

Pero muchas cuestiones se plantan de frente, gastos, caminos, no se, solo dejare que vallan las cosas, pero si puedo afirmar, que por una vez, es muy raro no ser el centro y protagonista del caos.


Isaac M. Mendoza
zakitobaby@gmail.com

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