10 enero 2013

EL MUNDO NO SE ACABO Y ACÁ SEGUIMOS.

Y llego el 2013.

Creo que haberse creído esa del fin del mundo que por… *trata de recordar cuantas veces van del mismo cuento de manera imposible* bueno, cuadragésima sexta vez se inventaron era un mal chiste. Y me pregunto. ¿Los mayas que culpa tienen que otras gentes ociosas interpreten mal las cosas? Ya bastante contentos estaban con su nombramiento de Chichen Itza como maravilla del mundo para que vinieran a salir con esta mala broma.

El día que tenga que pasar así será y ni frio vamos a sentir.

Y llego la navidad el año nuevo y el 2013. Un año más. ¿Qué tal les fue con sus propósitos? 

Yo particularmente mientras hace un poco más de un año empezaron las famosas “12 campanadas” y me atragantaba de uvas tratando de seguir el ritmo y no ahogarme en el intento, decidí no hacerme ni uno solo. Y no es que me guste la bonita tradición de fijarse metas (para no cumplirlas), fue solo que el 2011 para mi había sido un año de lo más gris, ahora sí que, ni pa’ lante ni pa’ tras.

Me sentí estacionado, y aparte en mal lugar, infraccionado, llevado al corralón y hasta hicieron chicharrón el carro¡


Por eso dije "¿Cómo para qué?" Mejor le echamos galleta y damos paso a paso sin mayores pretensiones que hacerlo mejor cada día y dar lo máximo. Y miren que me funciono. 

Si bien no fue exactamente un año espiparifactico *diría Tatiana* la verdad es que me sentí bastante satisfecho con todo lo logrado.

Entre varias cosas de las cuales recapitulando me siento satisfecho y contento; la salud, primero que nada. Después de una mala racha que hasta al hospital me llevo me aplique, me cuide y salvo uno que otro resfriado ligero, la verdad no pude haber estado mejor. Me siento sano física y mentalmente, con mis locuras, vicios, manías y miedos inevitables, pero contento conmigo mismo.

Trabajo, carajo, después de que entre a donde estoy, recuerdo hace ya casi dos años,  a las pocas semanas estaba harto fastidiado, después de lo mucho que me habían mimado en el anterior tuburio, llegue a un lugar que de inicio sentí que realmente era tan malo que por lo mismo me estaban pagando¡ Fui acoplándome, sorteando las cosas, y hasta, porque no decirlo, barbeando un poco con ciertos jefes molestos y heme aquí, dos años después en el mismo barco  y muy contento y satisfecho por lo que Smart me ha dado.

Creo que este año encontré un nivel de paz en el corazón que sentía lejano tiempo atrás, se aclararon muchas cosas, valore a algunas personas, retome viejas amistades, supere amores insufribles y deje de andar tirando tristeza por personas que no son reciprocas¡

Y algo que me tuvo muy contento, sin sonar material pero gaste como loco, el aumento de sueldo ayudo y me hice de muchas cosas que necesitaba y alguno que otro lujito, harta ropa zapato y hasta bolsos, me compre mi compu, mi cama y ropero por destacar algunas cosillas.

Y tome unas merecidísimas vacaciones, me di un Acapulcaso para relajarme y disfrute y me divertí como niño de kínder¡

Un buen año, es lo que puedo decir del 2012, no pedí y me dio mucho.

¿Qué creen que desee este año mientras pasaban esas doce campanadas y me volvía a atragantar de uvas¡¡? …Nada. Solo disfrute estar pasando ese momento con las personas que más amo y sintiendo la dicha de tenerlas conmigo, mi hermosa familia¡

Feliz año a todos ¡ 


  

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Isaac M. Mendoza
zakitobaby@gmail.com

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